El instituto británico NICE ha actualizado la guía sobre prevención y tratamiento de los problemas del pie diabético, que incluye recomendaciones sobre la atención y cuidado de los pacientes, evaluación de riesgos, problemas relacionados, tratamiento de las úlceras e infecciones y artropatía de Charcot.
Tras revisar y analizar las nuevas evidencias disponibles, no se modifican prácticamente las recomendaciones de la guía anterior de 2019, sobre el tratamiento de las infecciones del pie diabético y la selección de antibióticos; incluyendo una serie de recomendaciones generales y dos tablas para la prescripción de antibióticos en adultos >18 años, en infecciones leves (tabla 1) y en infecciones moderadas o graves (tabla 2).
Recomendaciones generales sobre tratamiento antibiótico
- Al elegir un antibiótico, habrá que tener en cuenta:
- Iniciar tratamiento antibiótico en personas con sospecha de infección de pie diabético tan pronto como sea posible; y tomar muestras para análisis microbiológicos antes o lo más cerca posible del inicio del tratamiento.
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- La gravedad de la infección.
- El riesgo de desarrollar complicaciones.
- Resultados microbiológicos previos.
- Uso previo de antibióticos.
- Preferencias del paciente.
- La prescripción se realizará:
- En adultos mayores de 18 años, seguir la tabla 1 para una infección leve o la tabla 2 para una infección moderada o grave.
- En niños y jóvenes menores de 18 años, solicitar el consejo de un especialista.
- Administrar antibióticos orales de primera línea si el paciente puede ingerirlos y la gravedad de la infección no requiere antibióticos IV.
- Si se administran antibióticos IV, revisar a las 48 horas y si es posible, considerar el cambio a antibióticos orales.
- La duración del ciclo de antibióticos debe basarse en la gravedad de la infección y la evaluación clínica de la respuesta al tratamiento. Revisar regularmente la necesidad de continuar el mismo.
- Informar al paciente sobre:
- Posibles efectos adversos
- Buscar ayuda médica si los síntomas empeoran rápida o significativamente en cualquier momento, o si no comienzan a mejorar en 1 o 2 días
- Cuando los resultados microbiológicos estén disponibles:
- Revisar la elección del antibiótico
- Cambiar el antibiótico de acuerdo con los resultados y si corresponde, utilizar un antibiótico de espectro reducido
- Reevaluar al paciente si los síntomas empeoran rápida o significativamente en cualquier momento, o no comienzan a mejorar en 1 o 2 días, o si la persona se encuentra muy mal sistémicamente o si tiene un dolor intenso desproporcionado con respecto a la infección. Hay que tener en cuenta:
- Otros posibles diagnósticos, como úlceras por presión, gota o úlceras no infectadas
- Cualquier síntoma o signo que sugiera una enfermedad o afección más grave, como isquemia de las extremidades, osteomielitis, fascitis necrosante o sepsis
- Uso previo de antibióticos
- No ofrecer antibióticos para prevenir las infecciones. Informar al paciente sobre la búsqueda de ayuda médica si se desarrollan síntomas de infección.
Prescripción de antibióticos
En la tabla 1 para tratamiento de infecciones leves, se incluyen los antibióticos orales de primera elección y posibles alternativas en casos de alergias o contraindicaciones; y en la tabla 2 para tratamiento de infecciones moderadas o graves, se incluyen también los antibióticos de primera elección (por vía oral o IV) y opciones adicionales si se sospecha (o confirma) infección por Pseudomonas aeruginosa o por Staphylococcus aureus resistente a la meticilina (siglas en inglés MRSA).
Todas las recomendaciones relativas al tratamiento de las infecciones del pie diabético y la utilización de antibióticos, se recogen en un resumen visual que se reproduce a continuación.


